17 de octubre de 2011

Algo así como, hacer de la vida algo fantástico para leer.


Para irme un poco del mundo me compré un libro. Meterme en historias fantásticas y aventuras, y olvidarme de las bizarreadas y traiciones que contiene la especia humana que, como dije, nunca para de sorprenderme... a veces para bien, seguido para mal.
Que me cuenten historias de duendes, bosques y almas puras hace que el ser humano se convierta en una especie de animalito torpe y testarudo. Es así, somos así... la naturaleza nos creó así. Inteligentes y hábiles, pero con ciertas mañas.
Ése mundo literal, me nutre para después poder llevar esa magia que rescato a los que necesitan una sonrisa y salvarse de no ser un humano testarudo más. Las historias me dan colores, y yo pinto.

Una breve notita dejé y ahora me voy a leer. Buena vida y sueños para ustedes.