Huracán Neruda

No sé que te duele más, que ya no te ame o que lo haga todavía.

Si queres te escribo uno, dos o Veinte poemas de amor y una canción desesperada, pero como dicen, va a haber un último verso. No te extraño.

'Ojos oceánicos' no por celestes sino por mojados.

'Nadie nos vio esta tarde con las manos unidas 
mientras la noche azul caía sobre el mundo. '

' Por qué se me vendrá todo el amor de golpe 

cuando me siento triste, y te siento lejana? '

' Niña venida de tan lejos, traída de tan lejos, 
a veces fulgurece su mirada debajo del cielo. '

Cuidador mio, supiste cuidarme una y mil veces

tan lejos que ni siquiera oiamos el aliento

supiste atarme

y ahora sin querer, supiste liberarme. 

El poema número veinte se lo dedico, a lo que queda de nosotros.

Había una vez...

¿Qué canciones son para mi?
¿Esas palabras tienen nombre?
No le des todos tus besos, prometiste que te ibas a guardar algunos... para mi.
Toda mi vida me enseñaron a compartir. Doy pan, doy mi tiempo. Pero a vos te quiero para mi.

Siento que mentís, cada palabra en un cuento. Deberías reescribirlo así ella no se da cuenta, puede que sea más inteligente que yo. Cuidado, mucho.

Mil canciones me inundan Olvera, Sabina. Hombres, no? Y una pequeña diferencia. Sabina comparte su amor, 'amor' y Olvera le canta a sus labios divididos, y él no los quiere compartir.
Te quise, te amo y esto recibo.

Tuve una autodefensa, algo así como una lágrima. Dije que no te quiero ver, ni hablar y parece que tu cabeza se miente a si misma. Es un juego entre tu mente y tu cuerpo. 'Te amo pero soy libre'. Esta canción es para las dos (pero más para vos mi amor).
No me pone triste por nosotros, ni por lo que no fue.
Pero no me encantes, no me leas cuentos de princesas porque ya tengo demasiadas hadas en mi cabeza. Tus historias me hacen llorar; y por suerte, unas lágrimas algo invisibles.


Había una vez dos personas, que dos personas fueron...

Y, si reía, él le daba la luna...

No cambiamos mucho. Nuestra esencia queda, la única que se la banca. Lo que nos brota de los poros.
Si de chicos le teníamos miedo a la oscuridad, es posible que de grandes también.
Siempre fui igual.
Hoy, tengo un complejito con el amor, y ¿adivina qué? de chica también.
Siempre me dio vergüenza cuando algún nene gustaba de mi. Y mi primer amorsito era más grande que yo. 11 y 6 Sí! como la canción de Fito, la canción de mi vida.
Obviamente que fue a escondidas de papá y mamá. Amigo de la vida y de la familia. Escondido.
Pero, me mudé. Sufrí. Lo pensé. Lo pensé y lo pensé...
Vamos, tenía 10 años cuando lo volví a ver. Mi primer reencuentro.
Yo creo que mi vida se resume en reencuentros. Y si hay reencuentro, hay despedidas.

De pseudo-grande, lo que soy ahora, siguen los reencuentros, despedidas y escondites secretos en el corazón. Ni una palabra, como de chiquita.

Veo veo

Tan fuerte en estado puro
Tan pobre si te acompaña la mentira, te desnaturalizan, te desinflan, te corrompen
Tan flojo si te mal usan, te volves gris, te volves vulgar
traicionero.
Uno más que no me supo usar. Una lágrima le corre al amor.
Venís y te vas, venís de golpe rojo y pasión
nos vamos grises, sin ojos ni piel.
Oh sweet child.
No escuche a nadie, ahora las palabras entran sin filtro y muy fuertes.
A veces sos mas fuerte que el decir, la lógica pierde también
Pero amor, cuando ya no estas, es difícil no sentirse perdida
vacía .
Y como podemos hacer para que ese nudo en la garganta se deshaga.

Me siento estúpida, con un vacío que no puedo ni respirar. Ayudame, no puedo.
Tocame, me ahogo.

             

Buen día, hoy vas a empezar sin nosotros. Porque fuimos otros, engañados que te perdimos
Te aviso, algo es más fuerte que vos amor, algo que no debería existir.

Alguien que tiene lugar en mis sueños, no se puede olvidar.