Algo que puedo hacer, es sentir lo mismo que el otro (creo que todo lo que piel y cerebro lo puede hacer). Esto a veces da resultados positivos, pero también los puede haber negativos. Y por eso hay veces que me privo de hacer algunas cosas, y de disimular otras. Evitar y resistir; después caer desplomada de cabeza.
Vergüenza, rechazo, intolerancia, para mi son emociones que solo basta con miradas para transmitirlas. Anhelo, culpa, decepción son otra cosa.
Yo creo que por estas emociones nos movemos. Sino seríamos simplemente piedras en el río.
¿El destino nos lleva y nos trae? ¿O somos nosotros, entes sin cuerda, que volamos sin rumbo y hacemos nuestro camino?. Inventamos dioses, seres superiores solo para justificar nuestras acciones, solo para asegurarnos de que vamos por el camino correcto.
Separaciones, decisiones, situaciones, emociones, todo eso nos maneja. Nuestro cuerpo y cabeza es la guía de nuestra vida. Y si queremos seguridad, allí estarán los seres de humo para ayudarnos. Pequeños personajes de nube que viven ahí adentro del cráneo.
Todos podemos necesitar un ayuda, no por eso somos débiles.
Lo tengo en claro, sé lo que quiero y a veces no. Mi mente cambia cada vez que el sol sale y se esconde.
Viviamos cada momento, porque de ellos está hecha la vida. Pelemos cada sueño, porque de ellos se construye nuestra vida. Acompañemos a los que queremos, porque ellos rodean nuestro camino.
