10 de junio de 2012

Valoración

Te confieso que me perdí en tus reclamos, me perdí pensando y descubrí algo si no hay amor en uno mismo, menos hay para el resto. Si pensas enamorarme, primero logra que ame mi cuerpo y mi alma tal vez, después, pueda vivir en vos. No despedí lágrimas y menos a vos. nos despedimos tantas veces y de tantas maneras que la estaca ya estaba clavada, diez mil veces en el mismo orificio. No quise una astilla más, no era necesario. Estuve con la mirada en el techo, escuchando el aire como cuando me ahogaba en los problemas. Pensé si estaba mal o bien, yin y yan, blanco o negro... pero ya estaba hecho, tocaba vivir lo que viniera. Y estoy mejor que nunca. Liberté. Nos toca armar nuestra libertad... no podremos tener pies, la edad suficiente, ni alas. Podemos encerrarnos en una habitación, pero cuando tenemos en la cabeza entre 4 paredes... Tenemos toda una infinidad de minutos para imaginar. Ser libres adentro nuestro. Liberarnos del espacio, crecer con la mente. Amar la vida. Si te digo que soñé con lo que todavía no tengo. Bruna, mi vida